40. NO QUIERO VOLVER

Miércoles 5 de junio

Me venía despertando, me hice la loca y no tomé el clona, no quiero ser dependiente, recuerden que yo jamás tomo nada. Finalmente a las 4 me desperté muerta de calor, no se podía respirar en el cuarto, entre la calefacción y que papá nos puso burlete por todos lados, no había una gota de aire. Decido tomarme la temperatura, por las dudas, 37.8, como diría mamá: “mierda, mierda, mierda” (si tengo 37.8 debería ir a guardia y ver qué pasa). Quería llorar, no estoy lista para volver, me gusta demasiado mi casa, estoy muy cómoda, tengo tantos proyectos para hacer acá, no quiero estar atada a la torre, no quiero otra vía periférica,  esos y mil pensamientos más. Lo despierto a Andy, porque para mí, él siempre sabe más que yo de enfermedades, le digo que tengo fiebre y le pregunto si debería tomar algo. “No tomes nada, está bien”, se duerme.. raro, pero si él dice… intentaré dormir. Mientras le había escrito a Jo todas mis preocupaciones. Le mando mensaje a Laura:

“Buen día laura, hace un ratito registre 37.8 de temperatura, está bajando sola, te llamo más tarde o espero tu llamado para ver si conviene que vaya al mater o no…

Con mucha esperanza de que me digas que no🤞🏼 pero espero indicaciones, gracias”

En algún momento me volví a dormir, Andy se levanta y se va, raro que no me pregunté cómo estoy… Le respondo a Laura que bajó la temperatura y me dice que la llame. Hablamos 3 minutos en los que me recuerda tomar Paracetamol antes del filgrastim y que por ahora, podríamos pensar que esas líneas de fiebre se deben a eso, que vayamos monitoreando a lo largo del día. F E L I C I D A D

Andy se da cuenta que me desperté y viene a saludarme, le digo que hablé con Laura y me mira con cara rara, "¿por qué?". Y ahí es cuando me doy cuenta que jamás se enteró que tuve fiebre y que estaba mega dormido anoche. Me levanto a bañarme y después ponerme la famosa bata, hoy es día de chicas así que me puedo poner lo que quiera. Decido tomarme este día con la mayor calma que existe en este planeta, no vaya a ser que tenga que volver.

Al mediodía llega Rosita. Ayer, muy malcriada, le escribí si podía venir a hacernos sus famosas pizzas caseras. Llega con todas las compras, preparadísima para un día de cocina. Se pone manos a la obras y nos cocina de todo, pizzas, peras riquísimas, milanesa de berenjena, ¡de todo!

Mientras, yo bordaba muy tranquilamente en el sillón, buscaba las fotos de la publicación de ayer, editaba... Pero todo muy tranquila. Estoy avanzando bastante con el bordado, me mando macanas pero voy… Almorzamos los tres juntos, las pizzas salieron bárbaras como siempre, esta vez creo que fui yo la que comió mucho.

Nos fuimos todos a dormir la siesta, antes me tomé el paracetamol de 1 gr. Me desperté para cuando Flo y mamá habían llegado, era la hora de la inyección. Andy termina su sesión de psicología y se prepara, hoy le toca a él. Se aparecen todos por mi cuarto, mamá estaba con que había que llamar a una enfermera para hacerlo. La echamos, se quedan Andy y Flo, es cero grave pero bueno, es una inyección. Flori me hacía mimitos en los pies y Andy preparaba la jeringa y el líquido. Les recuerdo que hay que ir poniéndolo muy despacito, en el medio de la inyección mamá grita: “llamemos a una enfermera y listo”. Así que Andy, en venganza me dice: “terminamos y pega un grito”. Hicimos todo el show pero ni se inmutó, se ve que tanto no le preocupaba. Pusieron los chipás en el horno, hoy era tarde de chipá celíacos, excelentes, pero pusieron como para todo el edificio. Andy se va a correr y Rosita lo acompaña también.

Nos quedamos con mamá y Flo en el sillón, hoy tuvo obstetra, todo muy bien, parece que es cabezón. Mientras charlamos, yo bordo, pero me equivoco y termino bordando dos telas juntas, ¡no saben lo lindo que estaba el pétalo! No tuve paciencia así que lo corte todo y chau, total era la primera vez que me pasaba, una fiaca pero no es el fin del mundo. Hablo por videollamada con Mons que estaba con su bebé, porque me tenía que ayudar con algo. Le cuento mi frustración y se me ríe. Cortamos y voy con el segundo intento del mismo pétalo… ¡¡Volví a hacer lo mismo!! Definitivamente no tengo la paciencia ni la energía para cortarlo todo de nuevo, igual parece que es solo los últimos puntos. Se lo doy a Flo que con la mayor paciencia del mundo lo va descosiendo… pero no terminaba más. Para cuando terminó sólo habían quedado dos puntadas de hilo, mi divino pétalo había desaparecido, ¡de nuevo! Hablamos con Jo que ya estaba en su cama para irse a dormir, ¡a cada rato mamá y Flo me hacían revisar que no estuviera bordando doble!

Hoy mamá me había traído la cabeza para poder poner la peluca, donación de Sonsoles madre, venía con cartita y chocolate, me conoce bien. Mañana les muestro fotos, hoy ya era tarde y no llegamos a hacer la producción.

Vuelve Andy y se van las chicas, hoy no me dolía la espalda, gracias paracetamol por existir. Yo ya estaba full bordado, terminando la primera de muchas, me quedó divina. Comimos sentados a la mesa, y de repente, escuchamos unos ruiditos, como de algo que está rascando. Hacemos silencio, sí, están ahí los muy turros, supongo que ya saben de quiénes hablo. La bronca empieza a aparecer nuevamente…

Comemos las peras de Rosita de postre, mientras vemos Madagascar 3, yo adicta como siempre, seguía bordando. Obvio que no la terminamos porque no dábamos más, nos vamos a la cama, rezamos juntos y a dormir.

PD: En relación a las reflexiones de ayer, muchos me fueron pasando ideas buenísimas, ya las voy a ir juntando y publicando para quienes quieran participar de esas acciones, ¡GRACIAS!