123. 6º CICLO - DÍA DOS
- Mery Torello
- 28 ago 2024
- 7 Min. de lectura
Martes 27 de agosto
Dormí muy bien, me desperté 5:30 h, ahí me desvelé un poco y terminé agarrando el celular. Terminados los regalos de los enfermeros, voy por mi siguiente proyecto, esta vez para personas que quiero mucho y me acompañaron todo este tiempo. La fiesta de pijamas no me la olvido pero quiero estar bien y con energía para cuando la hagamos. Habrá que esperar a ver qué nos dice el PET a inicios de octubre. Se escuchaban los robots y a las chicas yendo de un lado a otro, me costó dormirme pero finalmente lo logré. Dormité otro rato, sonaron literal 7 alarmas de Andy una atrás de la otra, increíble el tipo, por suerte lo quiero. Hoy se ve que me están dejando dormir, a las 8 h trajeron el desayuno, sin agua. A las 8:30 h por supuesto la nutricionista, aproveché para definir la comida de la noche y para pedir cosas ricas para la merienda, veremos qué toca hoy. Un poco antes de las 9 h viene Ricky, mi enfermero designado de las mañanas, para hacer los controles. Andy ya se había ido porque hoy tenía una reunión. Me levanto a desayunar, gran idea la banana, además me tomé el té, yo también me voy adaptando a la vida de sanatorio. Tomo las pastillas y llamo para el baño. Vino Mariel, lo más, le pedí bañarme y una crema para el cuerpo. Al ratito vino con toallas y sábanas. Me preguntó por mi sobrino y de paso le mostré la foto de hoy que están los dos con sweaters azules tejidos por mamá, super preciosos. Entro a bañarme mientras ella me cambia las sábanas, me ocupo de tratar de no inundar, ¡parece que este baño está inclinado hacia la puerta y el agua muchas veces llega hasta el cuarto! Se ve que tomé tantas medidas para evitarlo que realmente fue la vez que menos mojé el piso, capa total. Me siento a escribir y viene Virginia para el control matutino, me ausculta y mira la boca, todo bien. Después yo sigo escribiendo y buscando las fotos para dejar todo listo.

Llega Jose, super puntual obvio, yo estaba justo corrigiendo el capítulo, así que se puso a resolver cosas de su teléfono y justo la llamó Nonet. Termino la corrección y agrego las fotos para dejar todo listo. Cerca del mediodía nos vamos caminando al office de enfermería para ver si los enganchábamos a los tres enfermeros de la mañana juntos. Estaban Mariel y Ricky, así que les entregamos las bolsas bordadas con los regalitos, estaban re contentos. Mariel volvió a decirme que de todas las chicas que pasaron por acá soy las más activa, siempre haciendo algo. Estaba re sorprendida de que haya aprendido a bordar en este tiempo, y eso que su bolsa fue de las primeras, quería tenerla lista sí o sí. Andrea había bajado a almorzar, así que les pedí que le avisen y pase por mi cuarto cuando pueda. Con Jo volvimos y nos pusimos a jugar al rapigrama, justo vino Ricky y le explicamos cómo era. Yo me hice la canchera que era buenísima y esta vez no me fue tan bien, de repente tenía letras imposibles o pocas vocales, Jose no me dejó jugar bilingüe, mala onda. Terminó ganando ella, era obvio, yo iba para atrás, literal.
Vino mamá así que suspendimos el rapigrama y aproveché para almorzar acompañada de las dos. La sopa tenía re pinta pero apenas Jo la abrió sentí el olor y supe que no, igual la probé pero no es rica, no sé explicar el olor que tiene. El pollo y las papas noisette estaban muy bien y de postre durazno en almíbar. Mamá se fue, quería ir caminando a la peluquería así que tenía que salir con tiempo. Al rato llegó papá, se van a almorzar con Jo. Como nosotras no habíamos terminado el juego, aprovechamos a terminarlo y él se puso a corregir el capítulo.
Antes de que se vayan me levanté pero se me había enredado una manguerita abajo de las ruedas de la torre y casi me arranco todo, por suerte no pasó nada malo, un susto nomás. Me ayudaron a desenredarlo, se fueron y yo me acosté a dormir, creo que es el mejor horario, en el que pasa menos gente, veremos. Pues no mi ciela, entró Bruno para control, cuando me vio dormida lo hizo sigilosamente, solo revisó que las bolsas y robots estén bien. Después vinieron a sacar la basura, más tarde supongo que era limpieza de habitación pero solo fueron al baño, yo jamás abrí los ojos en todas estas entradas. Finalmente 15:30 h me desperté y al ratito llegó la merienda, ¿qué me habrán traído hoy? La intriga no es tan grande como para pararme a ver, voy a aprovechar un ratito más de cama antes de levantarme.
Me levanto al baño, viene Bruno a hacer los controles, en sus palabras, estoy “perfecta”. Le pregunto si está Ivi y me dice que sí, de hecho ella ya había preguntado por mí pero le dijo que estaba durmiendo, esperando con ansias que venga. Mientras espero aprovecho la tranquilidad para empezar a escribir el día de hoy.

De repente tocan la puerta y entran los cuatro: Ivi, Bruno, Cintia y Henry. Venían con un cartel buenísimo de “último segundo día”, tipo guirnalda, que pusieron en la cabecera de la cama, son lo más, lo imprimieron y pintaron ellos. Después se quedaron un rato charlando y le di la bolsa a Ivi, ¡era la única del turno día que me faltaba! Nos sacamos foto con su bolsa, pero esta vez con barbijo porque se está recuperando de un resfrío y no queremos arriesgar nada, ¡falta tan poquito! Creo que a esta altura ya está confirmadísimo que los enfermeros del cuarto piso de oncología son los mejores ¿no?
Después que se fueran a seguir con sus labores, me puse con mi cuaderno de Guests and Friends, que ya había empezado post siesta. Aproveché para tomar el té, hoy me trajeron dos muffins bañados en algo muy rico, y descubrí que mi mesa tiene un espejo escondido, todo muy fashion. Se suponía que papá venía a las 17 h pero ni noticias, para las 18 h mando stickers al grupo de: niño esperando desolado, otro de una niña encerrada mirando por la ventana y así hasta que me dieron bola.
Los primeros en llegar fueron Flori, Fede y Mateo, está tan lindo este bebé, además está combinado con Male, los dos usando los sweaters de mamá del mismo color, más divinos imposible. Me trajeron mi cookie preferida de Le pain quotidien y un pain au chocolate riquísimo. Después llegaron Male y Jose que venían de la plaza, Male con una super cookie de chocolate. El último en llegar fue papá, se había quedado re dormido, a la mañana había estado dos horas y media con Male en la plaza, agotador. Después de los protocolos de lavado de manos, se me acerca y me dice “Lulo, tenes algunos pelitos que pinchan” (o algo similar) a lo que le respondí que tiene razón pero que los de atrás no pinchan y le muestro, pero no se animaba mucho a tocar, terminó tocando con un dedito, me dio gracia. Le dije que me traiga un pañuelo del ropero, pero escuchó un ruido en la puerta y volvió corriendo pensando que iba a entrar el salvaje. Terminamos yendo juntas y cuando le pregunto si me lo puse bien me dice “No”, más honesta no vas a encontrar. Obvio que jugó con los botones de la cama, después me dieron a Mateo para tenerlo un rato, es una cosita divina. Sacamos dos mil fotos, obvio. Después de un rato la familia de los princesos se retiró, para empezar las rutinas de los dos.
Nos quedamos con Jo y papá a jugar al rapigrama, el de los dados. Arrasé increíblemente, terminaron jugando creo que 6 partidas más para llegar a los 200 puntos y definir el segundo y tercer puesto. Pasó Gonzalo para su exámen completo, a la madrugada me acordé que quería preguntarle qué tenía que hacer en caso de olvidarme de tomar alguna de las pastillas en casa, cosa que me pasó esta última vez, dos veces. Me dijo que no pasaba nada, que no tome doble. Vuelvo a verlo el jueves, quizás sea la última porque no suele hacerme seguimiento ambulatorio.
Tipo 20:30 h llegó Andy, ya habían venido a buscar la comida tres veces creo, pero ni la habíamos tocado. Venía con una pre muestra del libro de Male, para que definamos entre mate o brillo. Los liberamos a Jo y papá. Ponemos la mesa, en verdad Andy pone la mesa y comemos juntos, yo no estoy con mucha hambre, no tengo nauseas pero hasta ahí, terminé comiendo un poco y listo, el postre era compota de pera y esa sí la comí. Terminamos la partida de burako, la cual también gané y empezamos un segundo partido que interrumpimos para salir a caminar.
Después vinieron Lean y Belén, les di sus bolsas y nos sacamos foto, estaban re contentas, ¡son un amor! Les di también una caja de alfajores para Romi, que es la asistente de enfermería, con una mini cartita. Charlamos un rato más y ¡vimos que la primera bolsa había terminado! Me puso el reliverán fuerte para que termine de pasar lo último que quedaba y me dijo que se iba a buscar a farmacia la segunda bolsa, pero me la encontré por los pasillos y la peleé un poquito para que vaya. Ya me conocen, yo no quiero perder ni medio minuto si no es necesario, aunque ya sé que voy a terminar a la madrugada del viernes-sábado, lamentablemente. Lo único bueno es que voy a poder ver a las chicas del fin de semana y darles sus regalos, pero lo malo es que los sábados no les gusta dar el alta, la última vez me fui 12:30 h después de hacer piquete. Llegada la bolsa, me acompañó al cuarto y Andy aprovechó para bajar a comprarse un agua.
¡Finalmente 23:30 h fue el cambio a la segunda bolsa! Rezamos juntos con Andy en mi cama y nos fuimos a dormir.

Emoción total! Ultimo segundo día!
Que amor ese cartel que te hicieron y que lindo ir entregando regalos a quienes te cuidaron estos meses!!! Yo tmb les estoy súper agradecida! Hicieron toda la diferencia en la internaciones 🥰
Ay quiero foto de los dos con el sweater azullllll
Que amorosos los enfermeros con la guirnalda♥️ claramente sos especial!!!
El comentario de male fue: Lulo tus pelos son muy chiquititos y pinchan
🤣🫶
Que amor la guirnalda que te hicieron!!❤️🎊🎉
amé la sinceridad de Male y la foto post rapigrama. Que lindo ver cómo cada uno que fue parte de este camino recibe la bolsa y como se nota lo que generaste en ellos también por lo que te cuidaron y acompañaron este tiempo ❤️.